SINOPSIS
Esta pieza teatral de José Sanchís Sinisterra se centra en las desventuras de Ríos y Solano, dos míseros actores, integrantes de un ñaque (compañía teatral compuesta por sólo dos actores) en la España del siglo XVII, que, a través de ingeniosos diálogos, pasean su pobreza y su talento por los caminos de Castilla.
Ríos y Solano dudan, sienten, se interrogan e interrogan al público en un diálogo que profundiza sobre su propia condición de actores y sobre la condición y el papel de los espectadores en este encuentro. Pero sobre todo Ríos y Solano actúan y reflexionan constantemente a cerca de su condición de actores, se preguntan sobre su existencia y sus sentimientos tanto dentro como fuera del escenario.
Basando la obra en el texto, desfilan ante el espectador loas, entremeses, autos, comedias y refranes de esa otra realidad que fue el teatro popular y marginado del poder del s.XVI. La acción de los personajes se encamina a buscar un sentido a este encuentro concreto y a remediar el olvido del público en un intento desesperado por seguir existiendo en sus conciencias, una vez haya bajado el telón.
FICHA TÉCNICA Y ARTÍSTICA
Autor
JOSÉ SANCHIS SINISTERRA
Dirección
MIGUEL ÁNGEL MACIEL
Actores
ALBY ROBAYNA (Rios)
GERMÁN BARRIOS (Solano)
Asistente de dirección
YURENA MARTÍN
Escenografía y vestuario
CÉSAR CORUJO
Diseño de iluminación
PRODUCCIÓN FICTICIA
www.produccionficticia.com
Técnico de iluminación
SHELMA
Diseño gráfico
JESÚS DELGADO
www.jdcomunicacion.com
Música
MANUEL BECERRA
Producción
COMI-K TEATRO y
ACTÚA
Duración: 80 minutos
SOBRE LA OBRA
Ñaque es un ensayo didáctico, porque el autor recupera y muestra otra realidad del teatro clásico del s. XVI, desconocida y olvidada por la mayor parte del público, cual es la del teatro ambulante y marginal de los cómicos de legua. Ñaque también es una reflexión metateatral. Aborda el tema de cuál es la esencia del teatro, concibiendo ésta como el encuentro concreto entre actor y espectador, y estudiando esta relación, esto es la naturaleza del actor y la condición de espectador en ese encuentro.
Para ello Sinisterra crea un argumento en el que a través de dos cómicos ambulantes del s. XVI, y el encuentro con un público contemporáneo se produce una ficción metateatral donde los personajes narran sus andanzas y aventuras en sus representaciones. Sinisterra defiende en esta obra todos los la idea de despojar al teatro de todo lo accesorio, del sentido espectacular que ciega los sentidos, y concebir el lenguaje como creador de acción.
Para la defensa de este teatro mínimalista, puro y desnudo, el autor alega en su favor que el teatro en esencia ha existido desde siempre y no es una innovación de las vanguardias artísticas. Sinisterra demuestra por medio de la realidad del teatro clásico español del s. XVI, que junto a un teatro del poder existieron otras realidades marginales, manifestaciones populares que siempre fueron un intento de huída y liberación de los convencionalismos sociales creados por el poder.
En definitiva, en palabras del propio autor, el tema central de Ñaque es la investigación sobre “la condición del actor y su posición en la sociedad”. Ñaque es en esencia una reflexión sobre el teatro desde la propia experiencia teatral.